La grasa de las capitales

El paisaje cotidiano es el paisaje de la crisis.

Bajo esta premisa Guillermo Guarino sitúa su proyecto, para darle forma a una indagación sobre la condición laboral y económica actual: los mecanismo que operan, los caminos trazados y las alternativas.
Fragmentos de esa indagación se situaron en medio del caos: la sala principal de TRAMA albergó un espacio para la compra-venta.

¿Cómo enfrentamos la perpetua condición de crisis en la que vivimos? ¿Son las formas que impone el sistema las únicas que existen para sobrellevar la cotidianidad? ¿Qué puede hacer la astucia y la creatividad ante la inestable condición económica? Algunos tenemos más de dos trabajos, otros freelancean, doblan turnos, cantan, venden ropa, preparan comida y el 1% se regocija.

Durante la exposición de Guillermo Guarino, siete personas tomaron Trama Centro para compartir,  a través de la venta, sus formas de ganarse la vida. 

13 de Febrero de 2015